Saturday, December 13
LET US BE FAITHFUL
ZECHARIAH
“Are these not the words the Lord proclaimed through the earlier prophets…?”
Zechariah 7:7
Once more we find ourselves in that time of the
year when people think about God and about good will more than at any other
time.
It seems
that the closer we get to Christmas, the more we notice that people are willing
to express interest in religious things.
Church attendance and its related activities also increase.
Is this
greater religious activity honoring to God?
We need to
be careful that what happened to the people in the days of Zechariah does not
happen to us. Even though they were
involved in religious activities, they only wanted to please themselves. A
vital element was missing: obedience to God.
Instead of
performing empty rituals, God wanted them to show obedience, to administer true
justice, showing mercy and compassion, refusing to oppress the widows, the
orphans and the poor, and not devising evil plans against anyone else.
The best
way to honor God during this special season is by evaluating our own devotion
to Him in light of these four commands given to the people of God.
Our Lord
does not desire empty or selfish religious activities. He wants the gift of obedience expressed in
acts of kindness and usefulness for those who are less fortunate than we are.
Prayer: Father, grant that we may be faithful and
obedient. This is our prayer. Amen.
SEAMOS FIELES
ZACARÍAS 7
“¿No son estas las palabras que el Señor proclamó?”
Zacarías 7:7
Una vez más nos encontramos en esa época del año
cuando la gente piensa en Dios y en la buena voluntad más que en cualquier otra
época.
Parece que mientras más nos acercamos a la Navidad, más notamos que la
gente tiene una disposición a expresar interés en las cosas religiosas. Tanto
la asistencia a la Iglesia como las actividades de la misma aumentan.
¿Honra a Dios esta mayor actividad religiosa?
Debemos tener cuidado de lo que suceda no sea lo que le pasó al pueblo en los días de Zacarías. Aunque
ellos se involucraron en actividades
religiosas, sólo querían complacerse a sí mismos. Faltaba un elemento vital: la
obediencia a Dios.
En vez de llevar a cabo rituales vacíos, Dios quería que ellos le
demostraran obediencia, administrando verdadera justicia, mostrando
misericordia y compasión, rehusando oprimir a las viudas, a los huérfanos y a los
pobres, y no planeando contra los demás.
La mejor forma de honrar a Dios durante esta temporada especial es
evaluando nuestra propia devoción a Él a la luz de estos cuatro mandamientos al
pueblo de Dios.
Nuestro Señor no desea actividades religiosas vacías ni egocéntricas. El
quiere el don de la obediencia expresado en actos de amabilidad y utilidad para
los que son menos afortunados que nosotros.
Oración: Padre, que seamos fieles y obedientes. Es nuestro ruego. Amén.
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