Friday, August 20

ARE YOU LONELY?

Psalm 37:3-4

Trust in the Lord, and do good; so you will live in the land, and enjoy security.

Psalm 37:3 (NRSV)

            Sometimes we find it hard to turn over certain aspects of our lives to the Lord and wait for him to work.  An example is the search for a partner, husband or wife. When we are alone we often despair and question whether God really cares for us. It’s even more difficult when we fall in love but it is not reciprocated.

            But God does care for us. God knows our needs, understands our feelings and know what is best time to respond to our prayers. Our happiness should not depend on what we have or do not have, but it should be affirmed by what we surely will have in eternity. God has never failed to fulfill any of his promises. In his Word, God promised that he would be with us as we read in today’s text.

            Don’t be afraid of God’s will because it is good and pleasant. Better still, it is perfect!

 

Prayer: Dear Father, it’s so difficult to put my desires in your hands. Forgive me for doubting that you always know what is best for me. I know that your Word is true, and therefore I want to trust my life to your hands. Help me to always have faith in you, in the name of Jesus, my faithful Savior. Amen.

 

Translation by John Potter

 

 

Agosto 20,  viernes

¿USTED SE SIENTE SOLO?

Salmo 37:3-4

Tú debes confiar en Dios. Dedícate a hacer el bien

Salmo 37:3

            A veces nos cuesta entregar ciertos aspectos de nuestra vida en las manos del Señor y esperar a que Él obre. Un ejemplo es la búsqueda de pareja, esposo o esposa. Cuando estamos solos muchas veces nos desesperamos y hasta nos cuestionamos si realmente Dios cuida de nosotros. Es más difícil todavía cuando nos enamoramos, pero no somos correspondidos.

            Pero Dios sí nos cuida. Conoce nuestras necesidades, entiende nuestros sentimientos y sabe cuál es el mejor momento para responder a nuestras oraciones. Nuestra felicidad no debe depender sólo de lo que tenemos o no tenemos en el momento, debe afirmarse en aquello que tendremos, con seguridad, en la eternidad. Dios nunca dejó de cumplir ninguna de sus promesas. Él prometió en su Palabra que estaría con nosotros como vemos en el texto de hoy.

            No tengas miedo de la voluntad de Dios porque ella es buena y  agradable. ¡Mejor todavía, es perfecta!

 

Oración: Querido Padre, ¡qué difícil es entregar mis deseos en tus manos! Perdóname por dudar de que tú siempre sabes qué es lo mejor para mí. Sé que tu Palabra es verdadera, y por esto quiero entregar en tus manos mi vida. Ayúdame a confiar siempre en ti. En el nombre de Jesús, mi fiel Salvador, amén.