Sunday, April 30
LET US TRUST IN GOD
HABAKKUK 3:17-19
The
Sovereign LORD is my strength;
he
makes my feet like the feet of a deer,
he
enables me to go on the heights.
Habakkuk 3:19
The failure of the harvest and the death of the flocks would devastate
Judea. However, Habakkuk would affirm
that even in the midst of starvation, he would rejoice in the Lord. When
nothing makes sense to us, let us remember that God strengthens us. God will
give an abundant faith to his followers in difficult times. They will run like deer through rough and
dangerous terrains. God will exercise
His justice and will completely eradicate evil at the proper time. In the meantime, God’s people need to live in
the strength of his Spirit, trusting in the final victory of good over evil.
Let us live each day with its own challenges, let us not despair on
account of those things that we cannot control. Let us always trust in God, because He helps
us to carry our burdens. Let us be
patient and, as a popular song says: “Put on a cheerful face in bad weather,
because this, too, shall pass…”
I invite us to say to our God, as Habakkuk said: My sovereign God, you renew my strength…
Prayer: Lord, my trust is in you. Renew my strength so that I can face all of
today’s challenges and in each minute of my life. May your will be done. Amen.
Translation by Elisa Menocal
CONFIEMOS EN DIOS
HABACUB 3:17-19
Porque el Señor me da fuerzas;
da a mis piernas la ligereza del ciervo y me lleva a alturas
Habacuc 3: 17-19
El fracaso de la cosecha y la muerte de los
rebaños devastarían a Judá. Sin embargo, Habacuc afirmó que aun en medio de la
hambruna se regocijaría en el Señor. Cuando nada tenga sentido para nosotros
recordemos que Dios nos fortalece. Dios dará a sus seguidores una confianza
plena en los tiempos difíciles. Correrán como ciervos a través de terrenos
escabrosos y peligrosos. Dios ejercerá su justicia y terminará completamente
con el mal a su debido tiempo. Mientras tanto, el pueblo de Dios necesita vivir
en la fortaleza de su Espíritu, confiando en la victoria final sobre el mal.
Vivamos cada día con su propio afán, vamos a no
desesperarnos por aquellas cosas que no podemos solucionar. Confiemos siempre
en Dios, pues él nos ayuda a llevar nuestras cargas. Seamos pacientes y como
dice una canción popular: “al mal tiempo, buena cara, que toda pasa…”.
Les invito a que le digamos a nuestro Dios como
le dijo Habacuc: Dios mío, tú me das nuevas fuerzas…
Oración: Señor mi confianza está en ti. Renueva mis fuerzas para poder hacer
frente a todos los retos en este día y en cada minuto de mi vida. Sea tu voluntad.
Amén.