August 11, tuesday
COMMUNION IS LOVE
1 CORINTHIANS 11:23-26
After
giving thanks, he broke it and said, “This is my body, which is for you; do
this to remember me.”
1 Corinthians 11:24 (CEB)
Communion is the great act of the
love of God because it is the continuation, the actualization for us of the
delivery of Jesus himself to the cross. At the same time, it is the great act
of fraternal love in which all of us are united in Him. So communion is the
center of all Christian life, and in it, the sacrifice of Jesus marks a path
for our lives.
Communion is also the community
reunited around the table in order to remain in his love, his strength, his
peace and joy. In this way He and Jesus will stay in us always. This signifies
that his living water, his bead of life and His Holy Spirit will stay in us.
Each time we take communion, let’s examine our lives, renew
our vows of faithfulness and draw near to Jesus with human love. The night
before his crucifixion, Jesus Christ shared supper with the desire that they
remember that He gave himself for us,
and that we would not forget that he left the symbols of the bread and the cup.
Let us remember that he said: “Do this in remembrance of me”.
Prayer: Lord,
help us feel you in the bread and wine, and not forget our commitment to the
neighbor.
Translation by Pat Metcalf
Agosto 11, martes
COMUNIÓN
ES AMOR
1
CORINTIOS 11:23-26
"Tomad, comed, esto es mi cuerpo que
por vosotros es
partido; haced esto en memoria de mí”.
1 Corintios 11:24
La
Comunión es el gran acto del amor de Dios porque es la continuación, la
actualización para nosotros de la entrega que de síí mismo hizo Jesucristo en
la cruz. A la vez, es el gran acto del amor fraterno en el que todos nos unimos
a Él. Así la Comunión es el centro de toda la vida cristiana, y en ella el
sacrificio de Jesús marca una ruta en nuestras vidas.
Comunión
es también “comunidad reunida” alrededor de la mesa. Para permanecer en su
amor, su fuerza, su paz y su gozo. Debemos permanecer en obediencia a Dios. De
este modo Él y Jesucristo, permanecerán
en nosotros por siempre. Esto significa que su agua viva, su pan de vida y su
Espíritu Santo permanecerán en nosotros.
Cada
vez que comulguemos, hagamos un análisis de nuestras vidas, renovemos nuestros
votos de fidelidad y acerquémonos a Jesucristo y a todos los seres humanos con
amor. La noche antes de su crucifixión, Jesucristo compartió la cena en el
deseo de que recordaran que Él se dio por nosotros, y para que no lo olvidemos
nos dejó los símbolos del pan y la copa. Y recordemos que dijo: Haced esto en memoria de mí.
Oración: Señor, ayúdanos a
sentirte en el pan y en el vino, y a no olvidar nuestro compromiso con el
prójimo. Amén.
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