Thursday, February 11
Anniversary of “Juan G. Hall” Church (Cárdenas)
the first in the kingdom
Matthew 21:28-32
“I tell you the truth, the tax collectors and the prostitutes are entering
the kingdom of God ahead of you.”
Matthew 21:31b
This
parable, and in particular the phrase contained within our text today, explains
why the chief priests and the elders of the Sanhedrin were never able to accept
the prophetic message of Jesus of Nazareth, the Christ. He never balked at callings things by their
name, to the extreme of putting each person in his proper place, without regard
for the consequences, remaining loyal to his own words. Placing the underclasses above the most
prominent people was another example of the “absurd” content of Jesus’s
preaching. The parable of the two sons,
in addition to being a lesson of humility for the powerful at that time, is an
important call for our attention today. To begin with, our declared intentions
do not always result in good actions.
And secondly, our supposed apathies can contain hidden acts of true and
humble devotion and service.
Once again
the Teacher reminds us that appearances are not always what are most
important. We would surely be surprised
to know who are those whom God considers the first in his kingdom; those who
truly are in His favor.
Prayer: Oh God
of goodness, give us all the desire to respond to your calling. Allow us to humbly recognize our place in
your kingdom. We wish to be transparent, sincere, and not hypocrites. We ask
this in the name of your son, our example, Jesus of Nazareth. Amen.
Aniversario de la Iglesia “Juan G. Hall”
(Cárdenas)
Los primeros en el reino
Mateo 21:28-32
“… De cierto os digo, que los publicanos y las
rameras
van delante de vosotros al reino de Dios”
Mateo 21:31b
Esta parábola, y en particular la frase contenida en el texto áureo de hoy,
nos explica el por qué los principales sacerdotes y los ancianos del Sanedrín
no pudieron jamás aceptar el mensaje profético de Jesús de Nazaret, el Cristo.
Él nunca dudó en llamar las cosas por su nombre, hasta el extremo de poner a
cada persona en su debido lugar, sin importar las consecuencias, siendo fiel a
sus propias palabras. Poner a los desclasados por encima de los eminentes, es
también un ejemplo de lo “absurdo” contenido en la prédica de Jesús. La
parábola de los dos hijos, además de ser una lección de humildad para los
poderosos de aquel tiempo, es para nosotros hoy un importante llamado de
atención. En primer lugar, las intenciones que declaramos no siempre se
concretan en buenos actos, y por otra parte, las supuestas apatías pueden
contener veladamente actos de verdadera y humilde devoción y servicio.
Una vez más el Maestro nos recuerda que las apariencias no siempre son lo
más importante. Nos sorprendería seguramente saber quiénes son para Dios los
adelantados de su reino, quienes tienen realmente su favor.
Oración: Oh Dios bueno, danos todo
el impulso para responder a tu llamado. Permítenos reconocer con humildad
nuestro lugar en tu reino. Queremos ser transparentes, sinceros y no
hipócritas. Lo pedimos en el nombre de tu hijo, nuestro ejemplo, Jesús de
Nazaret. Amén
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