A devotional for the use of daily Meditations in the Word of God July-August-September 2014

A devotional for the use of daily

Meditations in the Word of God

July-August-September

2014

Presbyterian-Reformed Church in Cuba

Foreword

We human beings are all different.  We think, we feel, we talk and act in different ways. What is nevertheless the same for all, and which goes beyond the differences that distinguish us, is the promise that God extends to us to be with us at all moments with his blessings.

This is the possibility that we all equally share:  to entrust ourselves to his guidance, protection and mercy.  It is the invitation that God gives us to be present at each moment of our lives, when we are well but also, and even more so, when we are unsteady. It is the certainty that we can have that God knows us, loves us and always wants the best for us all and from each of us. It is up to us to accept the invitation.

May God allow these daily readings to be a tool in the walk of faith, permitting the reaffirmation once and again that everything comes from God, everything goes toward God, and that trusting in his blessing, nothing and no one can overcome us.

Un devocionario para el uso de

meditaciones diarias en la Palabra de Dios

Julio-Agosto-Septiembre

2014

Iglesia  Presbiteriana-Reformada en Cuba

Presentación

Los seres humanos somos todos diferentes. Pensamos, sentimos, hablamos y actuamos de manera diferente. Lo que sin embargo, y más allá de las diferencias que nos distinguen, sí es igual para todos, es la promesa que Dios nos extiende de acompañarnos en todo momento con su bendición.

Es la posibilidad que tenemos todos por igual, de encomendarnos en su guía, protección y misericordia. Es la invitación que Dios nos hace  de estar presente en todos los momentos de nuestras vidas, cuando estamos bien, pero también, y más aun, cuando tambaleamos. Es  la  certeza que podemos tener de que Dios nos conoce, nos ama y quiere siempre lo mejor para todos y cada uno de nosotros. Depende de nosotros aceptar la invitación.

Dios permita que estas lecturas diarias sean una herramienta en el camino de la fe, permitiendo reafirmar una y otra vez que todo viene de Dios, todo va hacia Dios, y que confiando en su bendición, nada ni nadie nos podrá  vencer.