Tuesday, September 6
THE HOPE OF THE
POOR
PSALM 9
For the needy shall
not always be forgotten,
nor the hope of the
poor perish forever
Psalm 9:18
After several decades in which we regarded as a fact that we
were all equal and that we were in the same condition, we have stumbled upon
the actual reality that it isn’t that way. Now we are assailed with the fact
that in our country there is poverty and there are poor people, and that we all
live in different socio-economic conditions. Many of us have feared that our
vision of life would be tarnished by this reality, having preferred to deny it
or to remain indifferent in the midst of our secure spaces and well-stocked
supplies.
However, the Psalm shows that for God, poverty is an
opportunity to reveal himself and for us to be engaged with those in need. The
psalmist tells us that hope is everlasting, but not poverty and need. We trust
in a God of justice who always sets as a priority the poorest and most
vulnerable. The statements of Jesus confirm this.
God is motivated to move toward his people because of our
scarcity, not only encouraging us but also feeding us.
Prayer: Lord, I ask you to come into the midst of our poverty and to
nourish our existence. Allow us to recognize the hunger of others and to be
willing to feed them. Amen.
Tranlated by
John Potter
LA ESPERANZA DE LOS POBRES
SALMO 9
Pero no se olvidará para siempre al necesitado,
ni para siempre se perderá la esperanza del pobre
Salmo 9:18
Después de varias décadas en
las que dábamos por hecho que todos éramos iguales y que estábamos en las
mismas condiciones, hemos tropezado con la sincera realidad de que no es así.
Hoy nos asalta el hecho de que
en nuestro país existen la pobreza y los pobres, de que todos tenemos
condiciones socioeconómicas diferentes.
Muchos hemos temido empañar
nuestra visión de la vida con esta
realidad, hemos preferido negarla o ser indiferentes, en medio de nuestros
espacios seguros y abastecidos.
Sin embargo, el salmo expone
que para Dios, la pobreza es una oportunidad de manifestación y para nosotros
de compromisos con los necesitados.
Nos dice el salmista que la
esperanza es perpetua, no así la pobreza y la necesidad.
Confiamos en un Dios de
justicia que siempre ha hecho de los más pobres y vulnerables su prioridad. El
testimonio de Jesús así lo confirma.
Dios camina hacia su pueblo
motivado por nuestra escasez; no sólo lo alienta, sino que también lo alimenta.
Oración: Señor, te pido que llegues en medio de nuestra pobreza y
alimentes nuestra existencia. Permite que reconozcamos el hambre de otros y que
nos dispongamos a alimentarlos. Amén.
No comments:
Post a Comment