Sunday, October 13
Sunday of lay ministry
ONE
COMMUNITY, MANY MINISTRIES
LuKE
17: 11-19
One of them, when he saw
that he was healed,
came back and praised God in a loud voice. (NIV)
Luke 17:15
At various times
I’ve asked myself if I feel the vocation and call to pastoral ministry. I
believe this concern is related to my life of dedication and service to the
church which has offered me a horizon of meaning and participation.
Although the
necessity of theological improvement, of knowing and deepening my understanding
of the teachings of the Bible, of our norms of faith and conduct as the
reformed church has helped me a great deal in my life both within and without
the church, I can’t imagine having the responsibility of regularly preparing
sermons and Bible studies for a community.
However, I
can’t conceive of my daily spaces without participating in the music ministry,
of educational programs for girls, boys, and young people, without being aware
of how I can contribute to each dream and need of my faith community.
Could it be
that my questioning about my pastoral vocation has to do with an inherited
learning in which pastors must know how to do everything right? Although we
believe in the universal priesthood of all believers, in our imagination the
work of the presbyter pastor continues to be the most important. The most
recognized, that requires a call, a special vocation. Without pretending that
it is not, I believe that as a church we must also recognize that God’s people
respond in multiple ways to the call we receive from Him, and to his many
blessings. We must bear witness to praise and service with our abilities,
whatever they may be.
Prayer: To you, our God, we
give thanks for the diversity of calls, of talents that you have placed in each
person. Allow us to serve you by giving our lives, by putting our small daily
efforts at the disposal of the community, of your possible kingdom among us. Amen.
Translated
by John Walter
Domingo del Ministerio
Laico
Una comunidad, muchos ministerios
Lucas 17: 11-19
…mientras
iban quedaron sanos. Uno de ellos al verse sano,
volvió
de inmediato alabando a Dios en alta voz
Lucas
17:15
Varias veces me he preguntado si siento la vocación y el llamado al
ministerio pastoral. Creo que esta preocupación está relacionada con mi vida de
entrega y de servicio a la iglesia, que me ha ofrecido un horizonte de sentido
y participación. Aunque la necesidad de superación teológica, de conocer y
profundizar más en las enseñanzas de la Biblia, de nuestras normas de fe y
conducta como iglesia reformada, me ha ayudado mucho en mi vida dentro y fuera
de la iglesia, no me imagino teniendo la responsabilidad de preparar sermones y
estudios bíblicos con regularidad para una comunidad.
Sin embargo, no puedo concebir mis espacios cotidianos sin participar del
Ministerio de la música, de los programas educativos para niñas, niños y
jóvenes, sin estar pendiente de cómo puedo contribuir a cada sueño, necesidad
de mi comunidad de fe.
¿Será que mi cuestionamiento sobre mi vocación pastoral tiene que ver con
un aprendizaje heredado en el que los pastores deben saber hacerlo todo bien?
Aunque creemos en el sacerdocio universal de todos los creyentes, continúa
siendo, en nuestro imaginario, el trabajo del presbítero pastor el más
importante, el más reconocido, el que requiere un llamado, una vocación
especial. Sin pretender que no lo sea, creo que como iglesia debemos también
reconocer que el pueblo de Dios responde de múltiples maneras al llamado que de
Él recibimos y a sus muchas bendiciones. Debemos dar testimonio de alabanza y
servicio con nuestras capacidades, cualesquiera que sean.
Oración: A ti,
Dios nuestro, te agradecemos por la diversidad de llamados, de dones que has
puesto en cada persona. Permite que podamos servirte entregando nuestras vidas,
poniendo nuestros pequeños esfuerzos cotidianos en función de la comunidad, de
tu Reino posible en medio nuestro. Amén.
No comments:
Post a Comment