Tuesday, July 2 THE LORD OPENS MY EYES 1 JOHN 4:14-15

Tuesday, July 2

THE LORD OPENS MY EYES

1 JOHN 4:14-15

And we have seen and do testify

that the Father has sent his Son as the Savior of the world.

1 John 4:14 (NRSV)

            We need Christ to open our eyes. Faith allows us to acquire his way of living, his point of view; in other words, a new perspective: seeing as God sees.

            We need to see that humanity is not a finished creation and that we must become not a sort of superman, technically and scientifically omnipotent, but much more, a child of God living out of his life, loving as He loves.

            We need to see that God counts on each of us to continue creating and making his new creation.

            We need to see that collective effort is necessary but to discover that this gigantic effort is the creation that continues and that must be continued with God the Creator present in the work from the beginning of all time.

            We need to see finally that everything is a part of this prodigious adventure: each one of us, equally indispensable, every event, and every one of our actions which are regressive toward death and forces progressive toward life.

            Yes, faith changes everything. By it I know who I am, where I am going with my brothers and sisters, and what I struggle for.

Prayer: Lord, open my eyes so that finally I may see. Amen.

Translation by John Potter

EL SEÑOR ABRE MIS OJOS

1 JUAN 4:14-15

Y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre 

ha enviado al Hijo, el Salvador del mundo

1 Juan 4:14

Necesitamos de Cristo para que se nos abran los ojos. La fe nos permite adquirir su manera de vivir, su punto de vista; es decir, otra perspectiva: ver cómo ve Dios.

Necesitamos ver que el ser humano no es una creación acabada y que tiene que llegar a ser, no una especie de superman, técnica y científicamente omnipotente, sino mucho más, un hijo de Dios viviendo de su vida, amando como Él ama.

Ver que Dios cuenta con cada uno de nosotros para seguir creando y haciendo su nueva creación. Ver que es necesario el esfuerzo colectivo, pero descubrir que ese gigantesco esfuerzo es la creación que continúa y que ha de proseguirse con Dios Creador, presente en el trabajo desde el comienzo de los tiempos.

Ver finalmente que todo forma parte de esta prodigiosa aventura: cada uno de nosotros, igualmente indispensable, cada acontecimiento y cada uno de nuestros actos que son a fuerza regresiva y de muerte, a fuerza de progreso y de vida.

Sí, la fe lo cambia todo. Por ella sé quién soy, a dónde voy con mis hermanos y hermanas y por qué lucho.

Oración: Señor, abre mis ojos para que por fin pueda ver. Amén.