Friday, May 11 PRAYER 1 THESSALONIANS 5:1-23

Friday, May 11

PRAYER

1 THESSALONIANS 5:1-23

Rejoice always, pray continually,

give thanks in all circumstances,

for this is God’s will for you.  (NIV)

                         

  1 Thessalonians 5:16-18

At times secret prayer can be only a whisper in pursuit of God, a sentence, a profound feeling. True prayer is not bound to external forms, nor to gestures or pretty words. The fundamental is that it be true. Persistent prayer takes place when we persevere once and again, no matter how much time has elapsed, nor discouragement, doubt or adverse circumstances, but centered only on the security of his love and mercy.

Trustful prayer goes with humility, because trust is found in Christ, and not in the one praying. Only the humble possess that trust. Truthful prayer is worked by the Spirit of prayer. He inclines everything so that prayer may conform to the will of God, thus helping you receive the best for you even when you don’t understand the entirety of his response.

Appealing prayer is when you recognize your weakness, your fragility, your doubts, fears, sins and faults, when you recognize that the power to change what you cannot is only in the Lord.

Effective prayer cannot be made by trusting in your own strengths, rather only in the love and power of God. Thankful prayer is the prayer that recognizes God for all his goodness and especially for the perfect gift: Christ. The prayer “seemingly” denied teaches us the times that what’s asked for isn’t the best for us. It shows us that it’s not the time. Then we internalize that if we have surrendered ourselves to the Lord we have surrendered to his holy will.

Prayer: thank you Father because I know with certainty that you listen to me through prayer. Amen.

Translation by John Walter

LA ORACIÓN

1 TESALONISENSES 5:1-23

Estad siempre gozosos. Orad sin cesar.

Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios

para con vosotros en Cristo Jesús.                             

  1 Tesalonicenses 5:16-18

La oración secreta a veces puede ser solo un suspiro en pos de Dios, una frase, un sentir profundo; la verdadera oración no va atada a formas externas, ni a gestos ni a palabras bonitas, lo fundamental es que sea verdadera. La oración perseverante tiene lugar cuando perseveramos una y otra vez, sin importar el tiempo que transcurra, ni el desánimo, la duda o las circunstancias adversas, centrados solo en la seguridad de su amor y su misericordia. La oración confiada va con humildad, porque la confianza se encuentra en Cristo y no en quien ora. Solo los humildes poseen esa confianza. La oración veraz es obrada por el Espíritu de oración. Él inclina todo para que la oración sea conforme a la voluntad de Dios ayudando de modo que recibes lo mejor para ti aún cuando no comprendas del todo su respuesta. La oración suplicante, cuando reconoces tu debilidad, tu fragilidad, tus dudas, miedos, tus pecados y faltas, cuando reconoces que solo en el Señor está el poder para cambiar lo que tú no puedes. La oración eficaz no puedes hacerla confiando en tus propias fuerzas sino sólo en el amor y el poder de Dios. La oración agradecida es la oración que reconoce a Dios por toda su bondad y especialmente por el don perfecto: Cristo. La oración “aparentemente” incumplida, nos enseña las veces que lo pedido no es lo mejor para nosotros, nos muestra que no es el tiempo, interiorizamos entonces que si nos hemos entregados al Señor nos hemos entregado a su santa voluntad.

Oración: Gracias Padre, porque sé con certeza que siempre me escuchas a través de la oración. Amén.