Tuesday, April 9
FAITH
IN YOU
MATTHEW
14:22-33
He
said, “You of little faith, why do you doubt?” (NIV)
Matthew
14:31b
Many
years ago a renowned preacher gave a lecture before an assembly of young
people. The theme was intended to strengthen the faith of those present
regarding the Word of God, and he gave them this advice, which even for our
days is still a magnificent counsel, since at times the heart often fails, and
hope has been lost.
We
live in a world in which doubt prevails, such as Peter when he sank into the
sea, and anguished, asked the Lord to save him. As long
as Peter had his eyes fixed upon Jesus, he could walk upon the water, serene
and safe. But as soon as he sensed the Lord’s gaze and observed the fury of the
storm, he was gripped by terror, and began to sink.
We
too are seized by terror when we feel threatened by storms that afflict the
world. As soon as we take our gaze away from the Lord we sink into the sea of
despair. He warns us to pass through any storm with faith and trust in his
promises.
Prayer: Lord, we ask that you sustain us, so that we
never become dismayed. Do not let us be swayed by doubt or fear. Amen.
Translated by John Walter
CONFIANZA EN TI
MATEO 14:22-33
… y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?
Mateo 14:31b
Hace muchos años que un predicador de renombre presentaba una conferencia
ante una asamblea juvenil. El tema llevaba como fin fortalecer la fe de sus
oyentes en la Palabra de Dios y les daba
este consejo. Es este un magnífico consejo aun para nuestros días, en
los que el corazón a menudo fallece y se ha perdido la esperanza.
Vivimos en un mundo en que impera la duda, como Pedro cuando se hundía en el mar y angustiado pedía el Señor que lo salvase.
Entretanto que Pedro tuvo la vista fija en Jesús, caminó sobre las aguas,
sereno y seguro. Pero apenas sintió la mirada y observó la furia de la
tempestad, preso de terror comenzó a hundirse.
A nosotros también suele embargarnos el temor cuando nos vemos amenazados
por las tempestades que azotan al mundo. Tan pronto como retiramos la mirada de
nuestro Señor, nos hundimos en el mar de la desesperación. Él nos alerta para
que atravesemos cualquier tempestad con la fe y la confianza en sus promesas.
Oración: Señor, te pedimos que nos sostengas
para que jamás desmayemos, ni nos dejemos vencer por la duda y el temor. Amén.
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