FRIDAY, FEBRUARY 16

Anniversary of the church “Jerusalén”( Jagüey Grande)

Celebration of the mission church in Marianao

REMOVE THE MENACING FINGER

Isaiah 58:1-9

Because the sovereign Lord helps me, I will not be disgraced. Therefore, I have set my face like flint, and I know I will not be put to shame. He who vindicates me is near. Who then will  bring charges against me? Let us free each other! Who is my accuser? Let him confront me!  (NIV)

Isaiah 50: 7-8

Fasting has been a common exercise in some groups of Christians for many years. Here, the attention is not focused on the practice itself, but rather we are alerted that any time of fasting should not remain the mere exercise of abstaining from drinking or eating food, or in mere reflection. God does not look at the time in which we remain without physically nourishing our bodies. It is about abstaining from ingesting the evil food that is in the world. We must ensure that we maintain a balance between reflection while we fast, and what we can do for ourselves, neighbors, nurture, edifying and healing relationships.

Jesus wants to call us to practice justice, kindness, love and mercy, while removing the finger that punishes, judges and condemns. It is sharing bread, caring for and protecting the vulnerable, to lighten the burdens that prevent them from walking.

In this time of Lent, let us reflect on the words of Isaiah and the invitation to care, accompany and serve. Thus, the light will be born upon us and the mercy of God will forever be our rearguard.

 

Prayer: Lord, may our minds and hearts always be ready to fast from everything that enslaves us and separates us from you. Amen.

 

Translation by John Walter

 

FEBRERO 16, VIERNES

Aniversario de la Iglesia “Jerusalén”( Jagüey Grande)

Celebración de la Iglesia dependiente en Marianao

QUITAD EL DEDO AMENAZADOR

Isaias 58:1-9

¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano? Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia.

Isaias 50: 7-8

El ayuno ha sido por muchos años un ejercicio común en algunos grupos de cristianos. Aqui la atención no se centra en su práctica en si, sino que se nos alerta, que cualquier tiempo de ayuno no debe quedarse en el mero ejercicio de la abstención de beber o ingerir alimentos, o en la sola reflexión. Dios no mira el tiempo en que permanecemos sin nutrir de manera fisica nuestros cuerpos, se trata de abstenernos de ingerir el alimento maligno que hay en el mundo, hay que velar por mantener un equilibrio entre mi reflexión mientras ayuno y lo que salgo hacer por mi prójimo, alimentar relaciones responsables, edificantes y sanadoras.

Jesús quiere nos llama a practicar la justicia, la bondad, el amor y la misericordia, quitando el dedo que castiga, juzga y condena, es compartir el pan; cuidar y proteger a los vulnerables, aligerarles las cargas que les impiden caminar.

En este tiempo de Cuaresma reflexionemos en las palabras de Isaias y la invitación para el cuidado, compañia y servicio; asi nacerá la luz sobre nosotros y la misericordia de Dios será por siempre nuestra retaguardia.

 

Oración: Señor, que nuestras mentes y corazones estén siempre prestos ayunar de todo lo que nos esclaviza y nos separa de ti. Amén.