Saturday,
September 19
UNMENTIONABLE FEELINGS
1 Peter 2:1-3
“Let us not
become conceited, competing against one another, envying one another.”
Galatians 5:26
There was once an eagle envious of another who
could fly much better than she. One day the eagle saw a hunter with bow and
arrow and said to him, “I want you to kill that eagle flying in the air.” The
hunter said he could do it; he only needed some feathers for his arrow. So the
jealous eagle plucked a feather from its wings. The hunter shot the arrow but
it failed to reach its target because the other eagle was flying too high. The
eagle pulled out another, and another, to the point at which she had lost so
many feathers that she herself couldn’t fly. The archer took advantage of the
situation, did a half turn and killed the jealous eagle.
Envy is the most unmentionable of human
feelings. It’s so dangerous that it can move a person to desire the death of
another. To be consumed by envy is terrible, it brings you suffering and a
descent into hypocrisy, saying horrible things, and finally it makes you a
destructive person.
“If you envy others it will be you who will be more
damaged by your actions.”
Prayer: Lord,
don’t let me be envy’s captive, free me from suffering this evil. Amen.
Translated by John
Walter
SENTIMIENTOS INCONFESABLES
1 Pedro 2:1-3
“No nos hagamos vanidosos, ni nos irritemos unos a otros,
ni sintamos envidia entre nosotros”
Gálatas 5:26
Había una vez un águila,
que tenía envidia de otra que podía volar mucho mejor que ella. Un día el
águila vio a un cazador con arco y flecha y le dijo, “Deseo que mates a esa
águila volando en el aire”. El cazador dijo que podía hacerlo, solo que necesitaba
unas plumas para su flecha. Así que el águila envidiosa sacó una de sus plumas
de un ala. El cazador lanzó la flecha pero no pudo alcanzar la otra águila
porque andaba volando demasiado alto. El águila sacó otra pluma, y luego otra…
hasta que había perdido tantas plumas que ella misma ya no pudo volar. El
arquero tomó ventaja de la situación, dio la media vuelta y mató al águila
envidiosa.
La envidia es el más
inconfensable de los sentimientos humanos, es tan peligroso que puede mover a
una persona a desear la muerte del otro. Vivir envidiando es terrible, te hace
sufrir, caer en la hipocresía, decir cosas desagradables, y finalmente te
convierte en una persona destructiva.
“Si tú tienes envidia de otros, el que será más dañado por tus acciones
serás tu mismo”.
Oración: Señor, no me dejes ser
cautivo de la envidia, líbrame de padecer este mal. Amén.
No comments:
Post a Comment