May 17, Tuesday
MUSIC BOXES
EPHESIANS 4:1-12
“It was he who gave
some to be apostles, some to be prophets, some to be evangelists, and some to
be pastors and teachers.”
Ephesians 4:11
I have a friend who has been collecting little music boxes for many years. In
addition to collecting them, she feels a sort of admiration for these beautiful
and rare objects. The other day she was
telling me that sometimes she compares them to the different types of people
with whom she has shared her life, and she described it to me in the following
way:
“Some have many adornments on the
outside, but they are empty on the inside.
Others have few external adornments but they are beautiful within. Some
show us an interior full of fantasies when we open them. Others are transparent and with just one look
at them, we can tell how they will always be. And then there are those that we
love only after having listened to the music from within them.”
Interesting, isn’t it? Isn’t it witty?
I believe that what my friend is saying
is quite true. Just as it is also true that our faith communities are filled
with brothers and sisters, all of a heterogeneity that makes the Church into
that great rainbow that God wants it to be.
There exist so many types of people; we are all different. But what is certainly true is that the most
beautiful melody, or the most terrible noise, can come out from the interior of
each of us. It depends entirely on oneself. It is up to us to decide whether to
merely adorn ourselves on the outside, or to adorn our lives.
Prayer: Lord, enlighten us so
that we can be one of those boxes that only share the music and beauty from
within ourselves. Amen.
CAJITAS DE MÚSICA
EFESIOS 4:1-12
“Y él mismo
constituyó a unos apóstoles; a otros profetas;
a otros
evangelistas; a otros pastores y maestros”
Efesios 4:11
Tengo una amiga que lleva muchos años coleccionando
cajitas de música. Ella además de coleccionarlas, siente una especie de
admiración hacia estos hermosos y raros objetos. El otro día me comentaba que a
veces las compara con las distintas clases de personas con las que ha
compartido su vida, y me lo describía de la siguiente manera. “Algunas tienen
muchos adornos, pero por dentro están vacías. Otras no tienen muchos adornos,
pero por dentro son bellísimas. Otras cuando las abrimos nos muestran su
interior pleno de fantasías. Otras son transparentes y con solo darles una
mirada sabemos cómo van a ser siempre. Y están aquellas que solo las amamos
después de escuchar la música de su interior”
¿Interesante verdad?
¿Ocurrente? Creo que lo que afirma mi amiga es muy cierto. Como también
es cierto que nuestras comunidades de fe están llenas de hermanos y hermanas,
todos de una heterogeneidad que hacen de la Iglesia ese gran arcoíris que
quiere Dios que sea.
Somos tantas clases de personas
las que existimos, todas somos diferentes. Pero lo que sí es cierto es de que
el interior de cada uno puede salir la más bella melodía, o el más terrible
ruido. Solo depende de nosotros. Depende de nosotros que adornemos nuestro
exterior, o que sea nuestra vida la que adornemos.
Oración: Señor, alúmbranos para ser una de esas cajitas que solo comparten música y
belleza desde su interior. Amén.
No comments:
Post a Comment