Wednesday, December 20 ENCOUNTERING CHRIST John 10:7-18

Wednesday, December 20

ENCOUNTERING CHRIST

JOHN 10:7-18

I came so that they could have life—

indeed, so that they could live life to the fullest.

 John 10:10 CEB

It is worth living when life has a purpose. You don’t have to be tossed from one side to the other by life’s currents. There are thousands and millions of people for whom life is something without a purpose, without meaning. Moreover, the Lord Jesus said: I have come so that they could have life—indeed, so that they could live life to the fullest.

And God has a plan and a purpose. The tragedy is that, so many do not find it because they do not find Christ, who is the fountain of life. Only when we surrender completely to God’s control will we find the secret of true life. But instead of doing this, many have persisted on their own path.

In this Advent season, let us remember that God presents himself in the form of a child. When we wait for the birth of the Son of God, we can think “But how am I going to leave the control of my life to a vulnerable little child who was born in a manger? The will of God is perfect, and his paths are unfathomable to us. If we want to find the secret of life and joy in its abundance, we must turn it over to the hands of God with a face of a child, and ask that his Spirit dwell within us.

To know this secret, we must be intentional, we must change and be challenged.

It is surprising what God can do through a person if one permits God to work his will in us. Why don’t you try it today?

Prayer:  Lord, use my life for your glory. Amen.

Translation by Deborah McEachran

HAY QUE ENCONTRAR A CRISTO

 JUAN 10:7-18

Yo he venido para que tengan vida,

y para que la tengan en abundancia

 Juan 10:10

Vale la pena vivir cuando la vida tiene un propósito. Usted no tiene que ser arrojado de un lado a otro por las corrientes de la vida. Hay miles y millones de personas para quienes la vida es algo sin propósito, ni significado. Mas el Señor Jesús dijo: Yo he venido para que tengan vida y vida en abundancia.

Y Dios tiene un plan y un propósito. La tragedia es que tantos no lo encuentran porque no encuentran a Cristo, quien es la fuente de la vida. Sólo cuando nos rendimos completamente al control de Dios, encontramos el secreto de la vida verdadera. Pero en vez de hacer eso, muchos han persistido en su propio camino.

En esta época de Adviento, recordemos que Dios se nos presenta en forma de niño. Cuando esperamos el nacimiento del Hijo de Dios, podemos pensar “Pero ¿cómo voy a dejar el control de mi vida a un pequeño e indefenso niño que nace en un pesebre?”  La voluntad de Dios es perfecta y sus caminos insondables para nosotros. Si queremos encontrar el secreto de la vida y gozar de su plenitud, tenemos que entregarla en las manos de Dios con rostro de niño, y pedirle que su Espíritu more en nosotros.

Para conocer este secreto, tenemos que hacer una decisión, tenemos que experimentar un cambio, y aceptar un desafío.

Es sorprendente lo que Dios puede hacer mediante una persona si ésta le permite obrar su voluntad en ella. ¿Por qué no pruebas en este día?

Oración: Señor usa mi vida para tu gloria. Amén.