Wednesday, June 3
DON’T THROW
MORE FUEL ON THE FIRE
PROVERBS 15: 1-5
A gentle answer turns away wrath, but harsh words stir up anger.
Proverbs 15:1
How many times do we find conflictive situations that could have
had a happy ending if only anger, violence, or intolerance hadn't stymied or
prolonged them, combining to impede an understanding? According to this proverb
a friendly response would be sufficient to extinguish anger, which is something
we well know is hardly the beginning of a series of calamities that threaten
peace and harmony. Don’t answer evil with evil; on the contrary, answer evil actions
with civil actions as the Gospel teaches. The perpetrators of evil are thus silenced
by the break in the cycle of violence. Naturally, we are talking about
something contrary to our human nature which always places us at the side of
those who are perceived as being right.
Brothers and sisters, it would be good to ask ourselves – no
matter whether it’s today or some future occasion we’re referring to – What
answer would we make to uncomfortable situations? If we want to fulfill the
will of God we shouldn't answer as any other person would. Remember that Christ’s
peace resides in our hearts, and this is sufficient to act as propitiators of
reconciliation and forgiveness. Our duty is “not to throw fuel on the fire”,
rather to diffuse it with the water of life that God has gifted us through the
example of his son, Jesus Christ.
Prayer: God of goodness, may we
always have the precise answer for situations of violence that flare up around
us; an answer of peace and love. Amen.
Translation by
John Walter
No echar más leña al fuego
Proverbios 15:1-5
La respuesta amable calma la ira;
la respuesta grosera aumenta el enojo.
Proverbios
15:1
Cuántas veces encontramos
situaciones de conflicto que pudieran tener un final feliz, pero este no llega
o se dilata, simplemente porque la ira, la violencia, la intolerancia… se
atraviesan e impiden un entendimiento. Bastaría una respuesta amable, según este
proverbio, para dar fin a la ira, que es algo que como bien sabemos es apenas
el comienzo de una serie de calamidades que atentan contra la paz y la armonía.
No responder al mal con el mal, al contrario, devolver con bien las malas
acciones, esa es la enseñanza del evangelio. Esa ruptura del ciclo de la
violencia, deja sin argumentos a los perpetradores del mal. Por supuesto que
hablamos de algo muy difícil para nuestra naturaleza humana, que siempre nos
ubica del lado de los que tienen la razón.
Hermanos y hermanas,
estaría muy bien preguntarse, comenzando el día o ya avanzado este ¿qué
respuesta tendremos ante las situaciones incómodas? Si queremos cumplir la
voluntad de Dios no debemos responder como cualquier otra persona lo haría.
Recordemos que en nuestro corazón vive la paz de Cristo, y bastaría sólo esto
para actuar como propiciadores de reconciliación y perdón. Nuestro deber es no
“echar leña al fuego”, sino apagarlo con el agua de vida que Dios nos ha
regalado a través del ejemplo de su hijo Jesús.
Oración: Dios de bondad, permite que siempre tengamos la
respuesta precisa para las situaciones de violencia que se suscitan a nuestro
alrededor; una respuesta de paz y amor. Amén.
No comments:
Post a Comment