Saturday, August 4, 2018

Saturday, August 4 LIVING IN UNITY JOHN 17: 20-26


Saturday, August 4
LIVING IN UNITY
JOHN 17: 20-26

May the God of steadfastness and encouragement
grant you to live in harmony with one another,
in accordance with Christ Jesus.
Romans 15:5 (NRSV)
            How can we live in unity with so many different types of people? Some people prefer to dress in vivid colors, others in dull colors. Some congregations prefer classical and traditional hymns, others those more contemporary. Christians differ on many questions and the result is often conflict within and outside the Church. Despite this, we need to exercise the patience and encouragement that God provides to help us to live in harmony with one another. Each believer has a gift to share in the Body of Christ. If we were all the same, how could we grow and learn?
            Our salvation is based on the one we worship, not on where or how we do it. Being fussy about the cut or style or color of our spiritual clothing leads us to fall prey to our carnal nature and not to God’s will for us. Personal preferences and sincere opinions are what make us individuals.
            Jesus prayed for unity among believers. God encourages us to do the same.

Prayer: God of unity, thank you for giving us the ability and the power to walk together in unity as brothers and sisters in Christ. We pray for unity among all Christians. May it start with me. Amen.


Translation by John Potter



VIVIENDO EN UNIDAD
JUAN 17: 20-26

Que Dios, quien da esa paciencia y ese ánimo,
los ayude a vivir en plena armonía unos con otros,
como corresponde a los seguidores de Cristo Jesús.
Romanos 15:5

¿Cómo se vive en unidad con tantos tipos diferentes de personas? Hay quienes prefieren colores vivos para vestirse; otros, colores apagados. Hay congregaciones en las que gustan de himnos clásicos y tradicionales; otras, de himnos más contemporáneos. Los cristianos discrepan en muchas cuestiones y el resultado suele ser a menudo el conflicto dentro de la iglesia y fuera de ella. A pesar de ello, debemos ejercer la paciencia y el aliento que Dios proporciona para ayudarnos a vivir en armonía los unos con los otros.

Nuestra salvación se basa en aquel a quien adoramos, no dónde ni cómo lo hagamos. Ser quisquillosos en cuanto al corte, al estilo o color de nuestra ropa espiritual hace que sucumbamos a nuestra naturaleza carnal y no a la voluntad de Dios para nosotros. Las preferencias personales y las opiniones sinceras son lo que nos convierte en individuos. Cada creyente tiene un don que compartir dentro del Cuerpo de Cristo. Si todos fuéramos iguales ¿Cómo podríamos crecer y aprender? Jesús oró por la unidad entre los creyentes. Dios nos alienta a hacer lo mismo.

Oración: Dios de la unidad, gracias porque nos das la capacidad y el poder de andar en unidad como hermanos y hermanas en Cristo. Oramos por la unidad de todos los cristianos. Haz que empiece por mí. Amén.


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