January 1, Friday 

New Year

DO NOT LIVE IN THE PAST

HEBREWS 12:15

 

”Don’t call me Naomi,” she told them, “Call me Mara for the Almighty has made my life very bitter.

Ruth 1:20 (CEB)

            When a person lets bitterness overpower their heart, they begin to live in the past and don’t see God’s provision, protection, presence and power in the present, and the possibilities that He has in store in the future.

            Naomi, Ruth’s mother-in-law suffered many losses in her life. But despite this, she had reason to praise God. The Lord gave Naomi a loyal and loving daughter-in-law, hunger no longer punished her native land, and she was able to live with her friends again. In addition, Naomi received the protection of Boaz, who was her family, and who did not allow her to lack anything. God changed the circumstances that afflicted Naomi and gave her a grandson to care for her in her old age.

            Today we also have the joy of having the Lord Jesus as our rescuer. He is the one who gives us what we need and protects us with his loving and faithful presence. We can’t let bitterness harm our life with Christ. Bitterness is a feeling that obscures our vision of reality and sucks away our hope in the future, contaminating even our relationships. We cannot forget that the future is as beautiful as God promises.

 

Prayer: Heavenly Father, in the beginning of this new year I come to ask for your blessing, so that I can look only at the hopeful future you have in my way. Thank you for the joy of having you in my life. Through Jesus Christ, Amen.

 

 

Translation by Patricia Metcalf

 

Enero 1ro, viernes

Año Nuevo

NO VIVA EN EL PASADO

HEBREOS 12:15

Por favor, ya no me digan dulce, llámenme amarga, porque Dios todopoderoso me ha amargado la vida

Rut 1:20

            Cuando una persona permite que la amargura se apodere de su corazón, comienza a vivir en el pasado y no logra ver la provisión, la protección, la presencia y el poder de Dios en el presente, y las posibilidades que Él reserva para el futuro.

            Noemí, la suegra de Rut, sufrió muchas pérdidas en su vida. Pero a pesar de ello, tenía motivos para alabar a Dios: el Señor le dio una nuera leal y amorosa, el hambre ya no castigaba a su tierra natal, y ella pudo volver a convivir con sus amigos. Sumado a ello, Noemí recibió la protección de Booz, que era su familia, y no permitió que nada le faltase. Dios cambió las circunstancias que el afligían y le regaló un nieto para que la cuidara en su vejez.

            Hoy nosotros tenemos también la alegría de tener al Señor Jesús como nuestro rescatador. Él es quien nos da lo que necesitamos y nos protege con su presencia amorosa y fiel. No podemos permitir que la amargura perjudique nuestra convivencia con Cristo. La amargura es un sentimiento que oscurece nuestra visión de la realidad y succiona nuestra esperanza en el futuro, contaminando aun hasta nuestras relaciones. No podemos olvidar que el futuro es tan bello como las promesas de Dios.

 

Oración: Padre Celestial, en el comienzo de este año vengo a pedirte tu bendición. Guía mi vida, Señor, de tal manera que pueda yo mirar solamente hacia el futuro esperanzador que tienes en mi camino. Gracias por la dicha de tenerte en mi vida. Por Jesús, amén.