Tuesday, March 11 I WISH TO BE LIKE A LITTLE CHILD MARK 10:13-16

Tuesday, March 11  

I WISH TO BE LIKE A LITTLE CHILD

MARK 10:13-16

“I tell you the truth; anyone who will not receive the kingdom of God like a little child will never enter it.”

Mark 10:15

Little children are special. I admire the ingenuity in their actions, and their great ability to forgive. We adults make our lives more complicated. We should learn more from children. We should imitate their games, their stories, their joys, their simple manner of resolving problems, the sincerity of their tears, and their unconditional love.

Jesus tells us that we need to become like little children in order to enter the Kingdom of God; a difficult task, is it not?  When we look at a child, we can see beautiful things through his eyes: sincerity, transparency, and tenderness.  As we become adults, the hard knocks of life begin to close our hearts and at times they close so tightly that we lose sight of the Kingdom; we lose our sensitivity toward simple and pure things. We should not lose sight of the child that lives within us. Wherever you happen to be today, observe the little boys and girls around you.  Contemplate those marvelous creatures that have such great lessons to teach us.

 Prayer: Lord, I ask you to help me today to embrace the values of little children: transparency, sincerity, tenderness, and the willingness to forgive.  Amen.

 QUIERO SER COMO UN NIÑO

MARCOS 10:13-16

“De ciertos os digo, que el que no recibe el reino de Dios como un niño, no entrará en él.”

Marcos 10:15

Los niños son especiales. En ellos admiro el ingenio presente en sus acciones, y su gran poder de perdonar. Nosotros, los adultos, hacemos más complicada nuestras vidas. Deberíamos aprender más de los niños. Hacer nuestros sus juegos, sus cuentos, sus alegrías, su forma sencilla de resolver los problemas, la sinceridad de sus lágrimas y su amor incondicional.

Jesús nos dice que debemos ser como niños para entrar al Reino de los Cielos; difícil tarea ¿verdad? Cuando miramos un niño, podemos ver a través de sus ojos cosas hermosas: sinceridad, transparencia y ternura. Cuando somos adultos los golpes de la vida van cerrando nuestro corazón y a veces se nos cierra tanto que perdemos la visión del Reino, perdemos sensibilidad hacia las cosas sencillas y puras. No podemos perder de vista el niño que vive en nosotros. Dondequiera que estés este día observa a los niños y a las niñas que te rodean. Contempla  esas maravillosas criaturas que nos pueden enseñar grandes lecciones.

Oración: Señor, te pido que me ayudes a abrazar los valores de los niños y las niñas: transparencia, sinceridad, ternura,  disposición para perdonar. Amén.