Sunday, August 7
PRIORITIES
MATTHEW
8: 18-22
Jesus
said to him, let the dead bury their dead.
Matthew
8:22
A little
while ago I participated in a course where a consultant imparted the subject of
how to make better use of our time. He took out a bottle with a wide mouth and
a tray of large stones and asked, “How many stones do you believe fit in this
bottle?” And he began putting in stones until he filled it.
“Is
it full?” he asked.
“Yes,”
we answered.
“Not
so,” he replied, and put a pail with gravel in it on the table. He put part of
the gravel in the bottle and began to shake it. The smaller stones penetrated
the spaces left by the larger stones.
He
smiled and asked again, “Is it full?” This time we replied, “Perhaps not.”
And
he placed a pail of sand on the table. Then he asked, “Is it full?”
“No!”
we shouted
He
took out a jar of water which he began to pour into the bottle, and it was
still not full.
“Well,
what has this demonstrated to us?” he asked. No one knew how to answer exactly.
“What this lesson teaches us is that if we don’t put the large stones in first
you will never be able to put them in afterwards.”
What
are the large stones in your life? Are they your health; your spouse; your
work; your meetings; power or money? Without doubt, God is that great stone,
the firm rock we should put in first place in our lives. The rest will in time occupy
its proper place.
Prayer: Lord, today we ask for the ability to discern
the true priorities in our lives. In your name we pray. Amen.
Translated by John Walter
PRIORIDADES
MATEO 8: 18-22
Jesús le dijo: deja que los muertos entierren a sus
muertos
Mateo 8:22
Hace poco tiempo participé en un curso donde un asesor nos impartió el tema de cómo
aprovechar mejor nuestro tiempo. Sacó un
frasco de boca ancha y una bandeja de
piedras grandes y preguntó: “¿Cuántas piedras creen que cabe en este frasco?” y
comenzó a meter piedras hasta que lo llenó.
Entonces preguntó: “¿Está lleno?”. “Sí”, contestamos nosotros.
“Pues no” replicó él Y puso en la mesa
un cubo con gravilla. Metió parte de la
gravilla en el frasco y comenzó a agitarlo. Las piedrecillas penetraron por los
espacios que dejaban las piedras
grandes. Sonrió y preguntó nuevamente: “¿Está lleno?” Esta vez respondimos:
“Tal vez no”. Y puso en la mesa un cubo con
arena. Entonces preguntó: “¿Está lleno?”, “No”, gritamos. Cogió una
jarra de agua que comenzó a verter en el frasco. Y este aun no estaba lleno.
“Bien, ¿esto que nos ha demostrado?” preguntó. Nadie supo responder
exactamente. “Lo que esta lección nos enseña es que si no colocamos las piedras
grandes primero, nunca podrás colocarlas después”.
¿Cuáles son las piedras grandes en tu vida: tu salud,
tu pareja, tu trabajo, tus reuniones, el poder o el dinero?
Sin dudas, Dios es esa gran piedra, la roca firme
que debemos poner en primer lugar en nuestras vidas. El resto, en su momento,
ocupará su lugar.
Oración: Señor, hoy te pedimos capacidad para discernir las verdaderas prioridades en nuestras vidas. En tu nombre
oramos. Amén.
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