Monday, April 11

ALWAYS AT OUR SIDE

Joshua 1: 1-9

Be strong and courageous. Do not be afraid; do not be discouraged for the Lord your God will be with you wherever you go.  (NIV)

Joshua 1:9

            Sometimes we suffer from insomnia. It is quite frequent, despite our going to bed tired after an exhausting day at work, that all of a sudden sleepiness abandons us and we find ourselves in the darkness of our bedrooms while hours pass. When that happens, our thoughts inevitably begin to impinge on us, and many times we feel fear. Generally, they are the worries and pressures we experience daily that cause that fear that keeps us awake. However, in accordance to our life experience, we are aware that it is necessary to confront and deal with this fear.

            It is known that the feeling of fear follows our steps as if it were a shadow. It attacks the weak as well as the strong. Sometimes, it can spread as if it were an epidemic, inflicting many people at the same time, even to the point of affecting multitudes. Caught in the middle of the situation, an individual can feel that God is his enemy instead of his liberator.

            Do you remember having confronted some problem, and that God had come to help, giving you the victory? Does the fact that the Lord had been faithful to you in the past help you to combat that sensation in the present?

            God walks at our side, be it in times of affliction or in the times of joy. His power is infinite and may assist us in conquering any of our fears.

 

Prayer: Thank you, Lord, for the security and confidence that you are always by my side and will never abandon me despite the storms of life. Amen.

 

Translation by John Walter

 

11 de abril

SIEMPRE A NUESTRO LADO

Josue 1: 1-9

Yo te pido que seas fuerte y valiente, que no te desanimes ni tengas miedo, porque yo soy tu Dios, y te ayudaré por dondequiera que vayas

Josué 1:9

            Algunas veces el insomnio nos acompaña. Es frecuente que, a pesar de que nos vayamos a dormir cansados después de un día agotador de trabajo, de repente el sueño nos abandona y nos encontramos en la oscuridad de nuestro dormitorio mientras las horas pasan. Cuando ello sucede, inevitablemente nuestros pensamientos comienzan a invadirnos, y muchas veces sentimos miedo. Generalmente son las preocupaciones y las presiones que experimentamos diariamente las que originan ese miedo que nos desvela. Sin embargo, de acuerdo con nuestra experiencia de vida, somos conscientes de que es necesario enfrentar y tratar ese miedo.

            Es sabido que el sentimiento de temor sigue nuestros pasos como si fuera una sombra. Ataca tanto a los débiles como a los fuertes. En ocasiones puede diseminarse como si fuera una epidemia, contagiando a muchas personas al mismo tiempo, hasta llegar a afectar multitudes. En medio de esta situación, el individuo puede sentir que Dios es su enemigo, en lugar de su libertador.

            ¿Usted recuerda haber enfrentado algún problema y que Dios haya acudido en su ayuda, dándole la victoria? ¿El hecho de que el Señor le haya sido fiel en el pasado puede ayudarlo a combatir esa sensación en el presente?

            Dios camina a nuestro lado, ya sea en los momentos de aflicción como en los de alegría. Su poder es infinito y puede ayudarnos a vencer cualquiera de nuestros temores.

 

Oración: Gracias Señor, por la seguridad y la confianza de que siempre estás a mi lado, y nuca me dejarás solo, a pesar de las tormentas de la vida. Amén.