Friday, November 9, 2018

Friday, November 9 CRY OUT IN ANGUISH 1 SAMUEL 1: 9-18


Friday, November 9
CRY OUT IN ANGUISH
1 SAMUEL 1: 9-18

“Go in peace,
and pray the God of Israel
 grant you what you have asked of him.”  (NIV)

1 Samuel 1:17

Who has not felt troubled when confronted with an overwhelming situation, and has cried out to God, asking for help?  Who has not made his own the words of the psalmist, “I will raise my eyes to the mountains […] my help comes from Yahweh.”

Life is full of heartaches. Like it or not, misfortune surprises us on multiple occasions. Our faith is tested there, in the middle of the situation that oppresses us.

Hannah felt sterility as an unbearable condition, which in her epoch carried a discriminatory treatment: childlessness was considered a divine curse, without considering that should her husband die she would be destitute if she had no son to represent her. It wasn’t for nothing that in the Bible constant mention is made about caring for orphans and widows.

If you believe that in some way you are trapped in a situation, then cast your eyes toward heaven and cry out to Him. The Lord doesn’t send blame as a reprisal, rather, he surrounds us with moments that finally permit us – just like Hannah – to sing a song of praise for the powerful hand of God that works marvels among us.

Passing through tests and difficulties, we will see them as a resource for reaching a more elevated plane of faith and relationship with God. 

Prayer: We know that we don’t always cry out to you with the faith that should move us. That we don’t always cry out with the necessary intensity and devotion as to recognize that you will respond to us. Even so, you show us your grace. Help us at least to recognize it and to praise you for it.
Translation by John Walter


CLAMAR EN LA ANGUSTIA
1 SAMUEL 1: 9-18
Ve en paz, y el Dios de Israel te otorgue
la petición que le has hecho
1 Samuel 1:17
¿Quién no se ha sentido turbado ante una situación abrumadora y ha clamado a Dios pidiendo ayuda? ¿Quién no ha hecho suyas las palabras del salmista: alzaré mis ojos a los montes... mi socorro viene de Yahvé?

La vida está llena de sinsabores, querámoslo o no el infortunio nos sorprende en múltiples ocasiones. Allí, en medio de la situación que nos oprime, nuestra fe se ve probada. Ana sintió el ser estéril como una condición insoportable, que en su época acarreaba además un trato discriminatorio por considerar el no tener hijos como una maldición divina, sin contar que, en caso de morir su esposo, se vería desamparada si no tenía un hijo que le representara. No por gusto en la Biblia se hace mención constante a tener preocupación de los huérfanos y las viudas.

Si crees que de algún modo estás en una situación sin salida, levanta la vista al cielo y clama a Él. El Señor no envía castigo como represalia, sino que nos rodea de momentos que nos permiten finalmente, como a Ana, cantar un canto de alabanza por la mano poderosa de Dios que obra maravillas en medio nuestro. Al atravesar pruebas y dificultades, miremos a ellas como un recurso por el cual alcanzar planos más elevados de fe y de relación con Dios.
Oración: Sabemos que no siempre clamamos a ti con la fe que debería impulsarnos; que no siempre oramos con la intensidad y la devoción necesarias como para reconocer que tú nos has de responder. Aún así tú nos muestras tu gracia, ayúdanos al menos a reconocerla y alabarte por ella. Amén.


No comments:

Post a Comment