Tuesday, January 11
FREE FROM SIN
PSALM 19
But who can discern their own errors? Forgive my hidden faults. (NIV)
Psalm 19:12
We experience forgiveness of sins when we surrender our heart to Jesus and believe in him as God and Savior. In other words, we give Jesus control of our spirit, our soul and body, and we allow him to guide our lives. Afterward, we experience a new life, full of gifts and God’s blessings. We become new people! One of the most important secrets to grow and triumph in life, is that each day we free ourselves from old sins, whether or not we have realized having made them.
At times, during our chores and activities, we say things we know are wrong, or we allow bad thoughts to spin about in our minds. Perhaps an incorrect look, a correct action we could have taken but didn’t, things that we accumulate during the day and need to ask God that he forgives us for them. Let us pay attention to this counsel: that each morning we ask God in prayer that he help us to obey him and not to commit sins.
Later, as night falls and before going to sleep, may we speak to him and ask him for forgiveness. When we repent, Jesus removes the sin and the blame from our life. We can have freedom and the purity to continue forward. May we go to bed with a clear heart.
Prayer: As the hymn says, “forgive if I was a cause of pain,” Lord. Amen.
Translation by John Walter
Enero 11, martes
LIBRES DEL PECADO
Salmo 19
¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos
Salmos 19:12
Cuando le entregamos nuestro corazón a Jesúús y creemos en Él como Dios y Salvador, experimentamos el perdón de los pecados. En otras palabras, le damos a Jesús el control de nuestro espíritu, alma y cuerpo y permitimos que Él guíe nuestra vida. Desde entonces experimentamos una vida nueva, llena de regalos y bendiciones de Dios. ¡Nos convertimos en nuevas personas! Uno de los secretos más importantes para crecer en la fe y triunfar en la vida es que cada día nos liberemos de los pecados realizados, sea que nos hayamos dado cuenta de haberlos cometido o no.
Durante nuestras tareas y actividades, a veces decimos cosas que sabemos que no están bien, o dejamos que malos pensamientos den vueltas en nuestra mente. Tal vez una mirada incorrecta, una buena acción que podríamos haber hecho pero no hicimos, cosas que acumulamos durante el día y necesitamos pedirle a Dios que nos perdone por ellas. Prestemos atención a este consejo: cada mañana pidámosle a Dios en oración que nos ayude a obedecerle y a no cometer pecados. Luego, al caer la noche y antes de dormir, hablemos con Él y pidámosle que nos perdone. Cuando nos arrepentimos Jesúús quita el pecado y la culpa de nuestra vida. Podemos tener libertad y limpieza para seguir adelante. Vayamos a la cama con el corazón limpio.
Oración: Como dice el himno, si fui motivo de dolor Señor, perdón. Amén.
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