Thursday, August 3
Anniversary
of the “Rev. Evaristo Collazo” Church (Remedios)
BE CAREFUL, BUT
DON’T BE AFRAID
ISAIAH 7:1-9
Take heed, be
quiet, do not fear,
and do not let your
heart be faint . . . (NRSV)
Isaiah 7:4
When we find ourselves in difficult situations, we often
don’t know how to act. There aren’t
formulas or recipes for that. For example, fear paralyzes us and prevents us
from seeing things clearly. In such a situation, we can make many mistakes and
make our problems become even more complicated.
Isaiah’s words in today’s reading allow us to see problems
from a different perspective. It opens our eyes saying: be careful, for there are risks in the path you are taking. It puts
us on alert, but at the same time gives us the strength to face it with
fortitude and courage, knowing that we are not alone in what we do. There is someone,
a divine being, who desires happiness for his creation.
The words of Isaiah resonate in our ears and speak to us
giving us the courage to face the situations in which we must live. It is up to
us to give life to these words by putting our lives in God’s hands. With all
his love and wisdom, He will keep us steady in faith, that faith which is
capable of everything, even of moving mountains. But we only want faith to move
hardened and depressed hearts so that they can return to hope and health.
Prayer: Lord, allow Isaiah’s words to become the motto for our daily
living. Amen.
Translation by: John Potter
Aniversario de la Iglesia “Rev. Evaristo
Collazo” (Remedios)
TEN CUIDADO, PERO NO TE ASUSTES
ISAÍAS 7:1-9
Ten cuidado, pero no te asustes;
no tengas miedo ni te acobardes…
Isaías 7:4
Al encontrarnos en
situaciones difíciles en muchos casos no sabemos cómo actuar. No hay fórmulas
ni recetas para eso. El miedo, por ejemplo, nos paraliza, no nos permite ver
las cosas claramente. Y ante esta situación podemos cometer muchos errores y
complicar más aun nuestros problemas.
Las palabras de Isaías
en el texto de hoy nos permiten mirar los problemas desde otra perspectiva. Nos
abre los ojos diciendo: cuidado, que hay riesgos en el camino que
estás transitando. Nos pone en alerta; pero a su vez nos da el aliento para
enfrentarlo con entereza y valentía, sabiendo que no estamos solos en lo que
hacemos. Hay alguien, un ser divino, que quiere la felicidad para su creación.
Las palabras de Isaías
resuenan en nuestros oídos y nos hablan dándonos el ánimo para enfrentar cada
una de las situaciones que nos toca vivir. Y está en nosotros darle vida a
estas palabras, poniendo nuestra propia vida en las manos de Dios. Él con todo
su amor y sabiduría, nos mantendrá firmes en la fe. Esa fe que es capaz de
todo, hasta de mover montañas. Pero nosotros sólo pretendemos que la fe mueva
corazones endurecidos, deprimidos, para que les devuelva la esperanza y la
solidaridad.
Oración: Permite Señor, que las palabras de Isaías se
conviertan en un lema en nuestra vida diaria. Amén.
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