Tuesday, July 21; BEHAVIOR AND FEELINGS

Tuesday, July 21 

BEHAVIOR AND FEELINGS

PSALM 119:161-168

Great peace have those who love your law,

and nothing can make them stumble. (NIV)

Psalm 119:165

Mark Twain once said that we can recognize if something we did was morally good if we feel good afterwards. But if we felt bad afterwards it was because it was morally wrong.   

This affirmation can be interpreted in the sense that feelings determine what is good or bad. A writer demonstrated the falsity of this interpretation when he ironically said that he liked Twain’s declaration because it implied that we will have to attempt to test things at least one time to know if they are good or bad.  

Feelings are not trustworthy indicators of behavior. The only fitting and trustworthy norm is the Word of God. Obedience to God’s commandments runs, at times, contrary to our emotions. For example: it’s not our normal tendency to forgive others; however, that is what God wants us to do.  

When we grow in our love of God and his laws, and when obedience becomes a pattern of life, we obtain divine approval. As a result, this gives veracity to feelings. The Psalmist called it “great peace,” which belongs to those who love God’s law.  

Prayer: God of love, work in us so that we may be doers of your Word. Amen.  

Translated by John Walter

Julio 21,  martes

CONDUCTA Y SENTIMIENTOS

SALMO 119:161-168

Mucha paz tienen los que aman tu ley, y no hay

para ellos tropiezo

Salmo 119:165

            Mark Twain dijo una vez que podemos darnos cuenta de si algo que hicimos es moralmente bueno  si nos sentimos bien después. Pero si después de que lo hicimos, nos sentimos mal, es porque era moralmente incorrecto.

            Esta afirmación puede interpretarse en el sentido de que los sentimientos determinan lo que es bueno o malo. Un escritor demostró la falsedad de esta interpretación cuando dijo irónicamente que le gustaba la declaración de Twain porque implicaba que hemos de intentar probar las cosas al menos una vez para saber si son  buenas o malas.

            Los sentimientos no son indicadores confiables de la conducta; la única norma digna de confianza es la Palabra de Dios. El obedecer los mandamientos de Dios a veces va en contra de nuestras emociones. Por ejemplo, no es nuestra tendencia natural perdonar a otros. Sin embargo, sabemos que eso es lo que  Dios quiere que hagamos.

            Cuando crecemos en nuestro amor a Dios y sus leyes, y cuando la obediencia se convierte en un patrón de vida, obtenemos la aprobación divina. Esto da como resultado sentimientos fundados en la verdad. El salmista  lo llamó mucha paz, la cual pertenece a aquellos que aman la ley de Dios.

Oración: Dios de amor, obra en nosotros para que seamos hacedores de tu Palabra. Amén.