Monday, September 21, 2020

 

 Monday, September 21

ADOPTED BY GOD

JOHN 1:9-13

Again, truly I tell you that if two of you on earth agree about anything they ask for,  it will be done for them by my Father in heaven.  (NIV)

Matthew 18:19

 On this day in which we prepare to embrace the Word of God under his guidance and protection, Jesus gives us this promise: He will give it. The Word comes alive through our faith and our experience with him; and it’s that we need to understand that once we are “adopted by God” everything we do and ask for in Christ’s name will be conceded to us, because our intercessory prayers for those we love - including for those we don’t know - influence God’s actions. When you speak and intercede God listens and works.   

 We could ask ourselves, “Why would our prayers be important? Why would God listen to us?”  The answer is simple: You are important to God, because you are his son. Everyone, once they’ve accepted Christ as Lord and Savior, becomes God’s sons and daughters, and inheritors of his Kingdom, a Kingdom of love and justice, of peace and hope.  

 Since at it’s this time, in this small space of prayer that we may place our burdens in him, because we trust in his promise, and we are attentive to his encounter. God bless you!

 

Prayer: Our Father, in you we deposit our burdens and agonies. Work according to your will. In Christ our Lord. Amen.

 

Translation by John Walter

 

 Septiembre 21,  lunes

ADOPTADOS POR DIOS

JUAN 1:9-13

“Les aseguro que, si dos de ustedes se ponen de acuerdo, aquí en la tierra, para pedirle algo a Dios que está en el cielo, Él se los dará”

Mateo 18:19

             En este día en que nos disponemos a abrazar la Palabra de Dios bajo su guía y protección, Jesús nos regala esta promesa:  Él nos dará. Palabra que cobra vida a través de nuestra fe y de nuestra experiencia con Él. Y es que tenemos que entender que una vez que somos “adoptados por Dios”, todo lo que hagamos y pidamos en nombre de Cristo, nos será concedido. Porque nuestras oraciones intercesoras por aquellos que amamos e incluso por los que no conocemos, influyen en las acciones de Dios. Cuando tú hablas e intercedes, Dios Escucha y Obra.

             Podríamos preguntarnos, ¿por qué tendrían importancia nuestras oraciones?, ¿por qué nos escucharía Dios? La respuesta es sencilla: para Dios tú eres importante, porque eres su hijo. Todos, una vez que aceptamos a Cristo como Señor y Salvador nos convertimos en hijos e hijas de Dios y herederos de Su Reino. Un Reino de Amor y Justicia, de Paz y Esperanza.

             Así que, en este tiempo, en este pequeño espacio de oración, pongamos nuestras cargas en Él. Confiemos en su promesa y estemos atentos a Su encuentro. ¡Qué Dios les Bendiga!

 

 Oración: Padre Nuestro en ti depositamos nuestras cargas y tormentos, obra según tu Voluntad. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

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